¿Has tenido miedo de tomar alguna decisión? Lo digo porque me he dado cuenta de que gran parte de lo que nos ocurre, tanto lo bueno como lo malo depende en gran medida de nosotros.
Hay un bello mensaje que espero logre influir en tu vida. Este relato se titula: “La mariposa azul”.
“Un hombre viudo vivía en compañía de sus dos hijas, tan inteligentes como curiosas, que constantemente atosigaban a su padre con preguntas de todo tipo, algunas por el deseo de saber más o salir de alguna duda; otras simplemente por poner a prueba la sabiduría de aquel hombre que las escuchaba siempre con atención, aunque no siempre sabía la respuesta.
Como la intención de él era dar a sus hijas la mejor educación, mandó a sus hijas de vacaciones a la casa de un sabio a quien conocía y pasaba su tiempo meditando en su casa, situada entre los pinares de una montaña.
Aquel hombre las recibió con gusto en su morada y las atendía con bondad y paciencia hablándoles de las cosas buenas de la vida y colmándolas de sabias enseñanzas. Por su parte, las niñas lo asaltaban con preguntas de toda índole, las mismas que el hombre respondía con certeza y serenidad.
Impacientes porque no lograban obtener del sabio duda alguna o falla en sus repuestas, decidieron inventar una pregunta capciosa que comprometiera al hombre a emitir una respuesta que por la misma naturaleza de la pregunta, daría lugar a que fuera equivocada.
“¿Qué vas a hacer? –preguntó la menor de ellas a la otra-. “-Voy a esconder esta mariposa azul entre mis manos y le voy a preguntar al hombre si la mariposa está viva o está muerta. Si me responde que está muerta, abriré mis manos y la dejaré volar. Si me dice que está viva, la aplastaré entre mis dedos y se la mostraré muerta. Cualquiera que sea su respuesta, ¡estará equivocado!”
Fueron entonces las dos muchachitas al encuentro del sabio quien dejó por un momento su meditación para atenderlas. “-Señor –inquirió la niña mayor- , tengo aquí entre mis manos una mariposa; es una mariposa azul, muy bonita. Dígame usted, que todo lo sabe, ¿está viva o está muerta? Desde luego que la pregunta no era con el fin de aprender algo, que al final sucedió, sino con el afán de molestar y poner en ridículo al sabio.
El hombre las miró con complacencia y serenidad en su rostro esbozando una leve sonrisa y le contestó a la niña: “Depende de ti. Tú la tienes en tus manos”.
Esta breve historia me hizo pensar y confirmar la razón de que un elevado porcentaje de lo que nos ocurre en la vida, depende exclusivamente de nosotros mismos, de la forma de afrontarlo y resolverlo.
La costumbre de muchos es culpar a los demás por sus desgracias o malas experiencias, en realidad esas son cuestiones que dependen de nosotros, el tomar la iniciativa y asumir la responsabilidad de nuestros actos para poder encontrar una solución.
Mucho antes de repartir culpa, debemos aceptar que lo que nos ocurre es porque tuvimos que ver, quizá lo ocasionamos por nuestro propio comportamiento. Lo peor que podemos hacer es buscar soluciones achacándole nuestras faltas a los demás.
Depende de nosotros que nuestra vida sea un cielo de felicidad o un infierno de reproches y acusaciones en lugar de poner en juicio nuestros actos. ¿Quieres una vida sana, alegre y optimista? Depende de ti.
Aquí te comparto algunas de las decisiones más importantes de tu vida, pues son las que marcarán tu presente y tu futuro:
1.- Depende de ti que tu cuerpo y tu mente se conserven saludables
Si enfermas eres tú quien debe esforzarse para volverlos a su estado ideal. Muchos ignoramos las señales que el cuerpo nos brinda, lo alimentamos mal, lo intoxicamos, dormimos mal, asumimos compromisos que lo cansan de más por no poder decir no y pocas veces lo ejercitamos. Todo esto hace que se oxide y se convierta en un saco de achaques y malestares.
2.- Depende de ti elegir a tus amistades
Me refiero a elegir personas de bien, amigos que te ayuden a crecer moral y físicamente, en lugar de seguir a quienes te hagan fallar. Recordemos el refrán que dice “Dime con quién andas y te diré quién eres”.
3.- Depende de ti cultivar tu mente con nuevos y buenos conocimientos
No porque ya no se esté en la escuela dejaremos de aprender. Hábitos como el de la lectura serán útiles para nutrir tu mente con sabiduría.
4.- Depende de ti alimentar tu espíritu
El conocimiento y el acercamiento a Dios o el ser superior en el que prefieras creer. Búscalo y no dejes de sorprenderte, pues en ocasiones somos negativos para aceptar los milagros, pero no nos damos cuenta de que nuestra vida en sí es un milagro.
5.- Depende de ti no perder la capacidad de asombro
La vida está llena de cosas bellas y simples, un amanecer, una noche estrellada, el poder abrazar a tu pareja y decirle cuánto la quieres, la sonrisa de tus hijos, el amor con el que tu mascota te recibe, una noche de luna llena…son cosas que puedes ver todos los días pero no por eso dejan de ser especiales.
6.- Depende de ti que tu vida sea una celebración constante
Te invito a que desde ahora pongas cimientos fuertes para que tu vida se construya con entusiasmo, con salud, con éxito, alegría, amor , todas las cosas buenas de la existencia.
Quizá has tenido un pasado difícil o te encuentras en una situación donde sientes que no es fácil superarle, pero quiero recordarte que no debes perder tiempo y energía en lo que no puedes cambiar. Decide hoy hacer una pausa, agarrar vuelo y tomar las mejores decisiones para tu vida, quizá será un poco difícil al principio pero cuando lo haces la tarea de todos los días, lo convertirás en algo automático y tu vida será otra.
