No estás acertando mucho en tus decisiones y empiezas a notarlo. Puede que esta situación te esté deprimiendo un poco y creas que eres un desastre. No es eso.
De la misma forma que no puedes acertar siempre, ten en cuenta que también es difícil fallar siempre. Recapacita más cuando tengas que decidir y presta mucha atención a todos los detalles.
Pisa en el suelo y déjate de fantasías o pensamientos complicados. En este momento tienes una buena idea dando vueltas por tu cabeza pero tienes muchas dudas sobre ello.
Confía más en tus impulsos y no dejes que esta idea se te escape ni olvides los detalles. Anótalo todo. Dentro de poco tendrás ocasión de ponerlo todo en práctica. Si estás preparada para ello será todo un éxito.
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