Padre Celestial, Dios amante y bondadoso,
Padre Nuestro bueno, tu misericordia es infinita,
Señor contigo tengo todo lo que necesito,
contigo a mi lado soy más fuerte y me siento acompañado-a,
por ello te suplico que seas Tú el dueño de nuestro hogar,
de nuestras vidas y de nuestros corazones,
habita y reina Padre Santo entre nosotros
y da serenidad a nuestros sentimientos y a nuestras almas.
Yo ....... con toda total confianza en Ti
y con la fidelidad de un hijo-a que ama a su Padre
te suplico extiendas sobre nosotros tu favor y bendición,
inunda nuestro ser con calma y serenidad,
vela nuestros sueños, acompáñanos en la noche,
vigila nuestros pasos, dirígenos durante día,
danos salud, tranquilidad, amor, unión, alegría,
haz que sepamos ser fieles y amigables entre nosotros,
que permanezcamos unidos en el cariño y la indulgencia
y que tengamos en este hogar la paz y dicha que ansiamos.
Permite que la Santísima Virgen María,
Madre de Tú bendito Hijo y amorosa Madre nuestra,
nos envuelva con su Santo Manto protector
y nos auxilie cuando las diferencias nos separen y entristezcan,
permite que nos tienda su dulce y tierna mano reconciliadora
para que se alejen las discusiones y los enfrentamientos,
deja que se quede junto a nosotros
y que Ella sea nuestro amparo ante las adversidades.
Señor envía al Ángel de la Paz a esta casa,
para que nos traiga la felicidad y la armonía
para que nos transmita la Paz que solo Tu nos sabes dar
y nos ayude en nuestros agobios e incertidumbres,
para que, en medio de las tormentas y de los problemas,
podamos tener comprensión en los corazones y pensamientos.
Señor míranos con agrado y danos tu favor y bendición,
haznos llegar tu ayuda en estos momentos de desdicha
y haz que los problemas y diferencias por los que pasamos
tengan pronta y favorable solución,
en especial solicito de tu infinita generosidad:
(pedir con humildad y confianza lo que se desea obtener).
Nunca nos abandones pues necesitamos de Ti,
que tu benéfico amor, tu justicia y fortaleza
nos acompañen y den estabilidad en cada momento;
que tu Presencia viva nos guíe y muestre el mejor camino,
que tu concordia nos transforme desde dentro hacia afuera
y nos haga ser mejores con los demás,
ayúdanos Señor a que cada instante de nuestra vida
el amor y la fe sean mas fuertes y grandes
y danos lo necesario para que cada noche al irnos a dormir
sepamos agradecerte todo lo que nos das.
Perdona nuestras faltas
y concédenos seguir viviendo en santa paz,
que el manantial de tu amor nos proteja,
que las esperanzas que depositamos en Ti no sean vanas
y nuestra confianza permanezca siempre firme en Ti.
Gracias Padre Celestial.
Amén.
Rezar tres Padrenuestros, tres Avemarías y tres Glorias.
La oración se hace, junto a los rezos, por tres días seguidos.